En un momento en el que la justicia medioambiental es más importante que nunca, la Red EU-LAT junto con otras 20 organizaciones internacionales, ha participado en el documental La Ilusión de la Abundancia, co-dirigido por Erika González Ramírez y Matthieu Lietaert.

Este documental nos presentan a Berta Cáceres, Carolina de Mouro y Máxima Acuña, tres mujeres defensoras de derechos humanos de América Latina, en primera línea, que defienden a sus comunidades del extractivismo de corporaciones multinacionales -los modernos conquistadores- que reducen sistemáticamente sus tierras, recursos naturales y medios de vida.

Al acercarse a la lucha de estas tres defensoras del medio ambiente, el documental no sólo descubre el modo en que algunas empresas multinacionales, también europeas, recurren a una amenaza legal e incluso física para continuar con su modelo económico. También muestra las luchas públicas y privadas de las mujeres defensoras y las consecuencias específicas de género que experimentan.

Ninguna ley puede devolver la vida. Ahora bien, la Comisión Europea, el Parlamento Europeo, y el Consejo de la Unión europea tienen una oportunidad única para que las empresas rindan cuentas. El 23 de febrero de 2022, la Comisión Europea publicó su propuesta de directiva sobre la Debida Diligencia Corporativa de Sostenibilidad. Éste es un paso largamente esperado desde la sociedad civil, ante la constatación del fracaso de las medidas voluntarias de cumplimiento de las obligaciones en derechos humanos y protección del medio ambiente.

Con las negociaciones de la directiva ya en marcha en el Parlamento Europeo y en el Consejo, este documental refleja la pertinencia de una debida diligencia europea que minimice los impactos negativos de las empresas sobre los trabajadores, las comunidades y el medio ambiente en todo el mundo, y que promueva la sostenibilidad y la justicia empresarial. Con el enfoque específico en las mujeres defensoras del medio ambiente, demuestra nuestra demanda de formular esta directiva de Debida Diligencia con una perspectiva de género, una referencia a los defensores, obligaciones ambientales y con la inclusión de toda la cadena de valor en el sector financiero.

Con las palabras de Máxima Acuña, defensora de la tierra en Perú: «Claro, nos van a dar dinero. Pero ¿qué podemos hacer sin nuestra tierra para vivir?».